No siempre hay flores.
A veces, hay piedras.
A veces las piedras son filosas y te raspan y te cortan cuando pasas por al lado.
Otras veces las piedras son cantos rodados. Bellos. Bien lisitos. Pero si los vas a pisar para pasarlos, también te molestan a los pies, como si fueran demasiado redondos para tu pisada. No son para pisar. No son llanitos como piso hecho por la mano del humano.
Las flores, a veces tienen espinas. Y hasta insectos escondidos entre los pétalos !
A veces duran un instante fugaz. Se marchitan al sol. O se deshojan. Y llueven pétalos como con melancolía. Como recordando viejos tiempos de gloria. A veces los viejos tiempos tampoco eran de gloria, solo que los ojos de la memoria suavizan un poco todo.
La cuestión es, hacer de cuenta que.
Que ahí sí están las flores. Hay que apreciarlas en su instante de júbilo. Sacarles foto. Y disfrutarlas cada vez.
Todo esto para decirte, que recuerdes esos instantes de alegría inusitada. Que te acuerdes cómo te sentías. Y atesores esa sensación. Esa sensación tuya, personal. Y hay que hacer de cuenta que, ahí siguen las flores. Están más cerca de lo que crees.
En tus ojos continúa viviendo la belleza.
Que lo pases muy lindo en Navidad.
Y también cada día.
Que seas, vayas siendo, feliz. Que vivas cada instante mágico, en su plenitud.
Precioso escrito Mef y cuanta razón llevas... Ojalá cada vez más personas sean capaces de atesorar la belleza y alegría que en algún momento seguro los rodeará. Al fin y al cabo, los tesoros del alma son el mayor bien que podemos conservar.
ResponderEliminarMuchísimas gracias por las lindas palabras que has dejado en mi blog y que pases unas muy felices fiestas!!!
Hola Aneu. Gracias por venir a mi blog. Bienvenida ! Lo que permanece justamente es lo que no podemos "comprar". Felicidades ! Flores para ti !
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